El calor es un síntoma de que tu cuerpo necesita algo, ese algo es líquido y ese líquido lo llevan la mayoría de los alimentos. Pero... ¿cuáles?
Las ensaladas -lechuga, tomate, pepino, manzana, zanahoria, etc.- tienen un alto contenido de líquidos y, como se toman fresquitas, sirven para saciar la sed y la ansiedad de calor.
La fruta es otro alimento que nos ayuda a paliar esa horrible sensación: la sandía es pura agua y casi no contiene azúcares, el melón es otro cantar -contiene más azúcar que la sandía-; pero la inmensa mayoría de la fruta tiene estas propiedades.
El agua es el elemento indispensable para nuestra vida, fuente de minerales y oxígeno, dan a nuestro organismo muchos nutrientes y, en verano, es el símbolo de la existencia. Quien tiene agua, tiene el poder...!
¿Y vosotras? ¿Cómo os saciáis en esta época?
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